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El mundo de la fisioterapia es un abanico de métodos y tratamientos que ayudan a una gran variedad de afecciones relacionadas con la vejez, con el deporte, con las articulaciones, lesiones y mucho más.

Por lo tanto, a veces pueden surgir ciertas afirmaciones o creencias sobre la fisioterapia que no siempre resultan ser del todo verdad, o bien resultan ser totalmente falsas o erróneas.

Hoy, en Neurosport Ávila, os ayudaremos a identificar los mitos más típicos que hablan sobre la fisioterapia y a desmentir y/o aclarar lo que se esconde detrás de estas creencias.

 

MITO 1. NECESITO QUE MI MÉDICO ME ENVÍE AL FISIOTERAPEUTA.

Este mito es totalmente falso. En unos estudios recientes, se ha revelado que al menos un 60% o 70% de las personas creen que necesitan una autorización o derivación de su médico para poder acudir o ser evaluado por un fisioterapeuta, pero esto no puede ser más incorrecto.

Se puede asistir a una evaluación con un fisioterapeuta en cualquier momento y sin necesidad de que os evalúe vuestro médico de cabecera.

 

MITO 2. LA FISIOTERAPIA SON SÓLO MASAJES.

No se puede estar más equivocado al hablar sobre este tema. Los masajes terapéuticos son solo una pequeña parte de un tratamiento de fisioterapia, ya que, además, esta disciplina trata otras múltiples afecciones además de las musculares, como por ejemplo fractura ósea, luxación, politraumatismos, etc.

Esto incluye diferentes tratamientos que pueden realizarse mediante varios métodos que no incluye un masaje terapéutico como la electroterapia, la crioterapia, termoterapia, entre otros.

 

MITO 3. LA FISIOTERAPIA ES SOLO PARA DEPORTISTAS.

Este es otro de los mitos falsos y, además, uno de los más frecuentes.

Si bien es cierto que la fisioterapia es una gran herramienta para los deportistas, no está limitado sólo a su uso. La fisioterapia es muy útil en casi cualquier etapa de la vida e incluso sirve para tratar afecciones de la vida diaria, tales como tortícolis, un esguince, o una tendinitis.

 

MITO 4. UN FISIOTERAPEUTA NO PUEDE REALIZAR UN DIAGNÓSTICO.

Esto es totalmente falso. Un fisioterapeuta suele diagnosticar enfermedades en su etapa más inicial, analizan los desequilibrios musculares, problemas de postura, afecciones óseas, etc.

Con hacer estos análisis, podemos encontrar el origen del dolor o del problema que afecta a nuestro paciente y, de esta manera, encontrar un tratamiento adecuado o, en su defecto, derivar con un especialista si es un caso que no se pueda solucionar con la fisioterapia.

 

MITO 5. LA FISIOTERAPIA DUELE.

Un mito muy recurrente en consultas es la gran cuestión de que, al realizar un tratamiento fisioterapéutico, el paciente tiene la creencia de que esta dolerá siempre.

Esto no es una realidad por norma general; si bien existen tratamientos que pueden generar molestias a la hora de realizarse, no todos los tratamientos fisioterapéuticos generan dolor.

Además, a la hora de un tratamiento, los fisioterapeutas debemos acoplarnos a la tolerancia de nuestro paciente y, en caso de que no pueda realizarse el tratamiento estipulado, se busca encontrar otras metodologías que puedan realizarse sin dañar al paciente.

 

MITO 6. LA FISIOTERAPIA SON SÓLO EJERCICIOS.

Como ya os hemos mencionado anteriormente, la fisioterapia abarca muchísimos tratamientos para múltiples afecciones, por lo que, definir cada método y tratamiento, sería una tarea muy compleja de realizar.

Si bien los ejercicios son una parte fundamental del tratamiento, no son lo único que se realiza a la hora de tratar una afección. Los ejercicios que os brindamos los fisioterapeutas están mayormente destinados para una mejor y pronta recuperación o para elevar las posibilidades de que esta afección o lesión no vuelva a ocurrir en el futuro, pero no suelen ser la totalidad del tratamiento, sino una pequeña parte de él.

 

MITO 7. UN PACIENTE PUEDE HACER FISIOTERAPIA POR SU CUENTA.

Muchas veces podemos encontrar personas que creen que la fisioterapia no vale la pena y que con unos cuantos ejercicios de internet podrán recuperarse de su lesión. Sin embargo, un fisioterapeuta sabe exactamente qué debe estudiar de la lesión para poder abordarla y ofrecernos un tratamiento personalizado, así como encontrar su origen y desde este punto determinar este tratamiento.

De esta forma, se logra encontrar un equilibrio entre lo que puede realizar el paciente y lo que no será contraproducente para esa lesión en particular. Sin estos conocimientos, se corre el riesgo de realizar ejercicios o tratamientos que no sean adecuados para la lesión que se está buscando tratar y que, por error, se realicen ejercicios equivocados que puedan empeorar la situación o causar otros problemas adicionales.

 

Un fisioterapeuta ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas y a corregir conductas, hábitos o lesiones que podrían perjudicar al paciente en su vida diaria. Por eso, siempre os recomendaremos desde Neurosport Ávila que, ante cualquier molestia que pueda surgiros, acudáis a un profesional que pueda tratar vuestro problema para que podáis recuperaros lo más pronto posible.