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Cuando se habla de tener una buena salud, siempre se suelen incluir las indicaciones de mantenerse activo y de hacer abundante actividad física; además de tener una dieta balanceada y rica en nutrientes, proteína y fibra.

Sin embargo, el deporte, además de brindarnos buen estado físico, buena circulación y todos los beneficios que suele aportar el deporte, es verdad que en caso de hacer actividad física en exceso o realizar ciertas actividades de forma errónea, pueden surgir lesiones que nos afecten de forma muy negativa y nos generen dolor, dificultad de movimiento o incluso problemas más graves.

Pues bien, con este post, desde Neurosport Ávila, os contaremos por qué es sumamente importante que, al tener una lesión, acudáis a un profesional para curarla adecuadamente y cuáles serían las posibles consecuencias de no tratar correctamente el problema desde el primer momento.

 

¿CUÁLES SON ESTAS LESIONES?

 

Generalmente, para alguien que hace deporte de forma regular, es fácil identificar los posibles escenarios de lesiones o, inclusive, identificar cuáles son las lesiones más frecuentes según sus propias características físicas.

Sin embargo, esto no siempre ayuda a evitar que se sufra un accidente o una lesión durante el deporte o actividad que se esté realizando. Podemos identificar, mediante un análisis de las consultas más comunes, cuáles son las afecciones más recurrentes.

Por lo general, encontramos:

 

• Lesiones de hombro: Esta es una lesión muy típica tanto en deportistas como en no deportistas. Pueden ser causadas por movimientos bruscos como los lanzamientos o por una tendinopatía causada por varios movimientos o levantamiento de peso repetidas veces.

 

• Lesiones de rodilla: Estas lesiones pueden aparecer por diversos motivos, pero especialmente se encuentran en personas que realizan actividades como correr o saltar, tales como el fútbol, el baloncesto y el atletismo.

 

• Lesiones de tobillo: Estas, al igual que en el caso anterior, suelen verse en personas que realicen actividades que requieran correr o saltar. En este caso también pueden aparecer en personas que hagan futbol, baloncesto, voleibol, entre otros.

 

• Lesiones de espalda: Son una de las más comunes, ya que son generadas de varias formas. La mayor parte del tiempo, se encuentran en personas que realicen actividades donde se tuerce la espalda, como el golf o el levantamiento de pesas. Por esto, es normal que pacientes que acuden con este problema suelen hacer actividad recurrente o acudir al gimnasio.

 

¿POR QUÉ DEBO TRATAR ESTAS LESIONES?

 

Cuando tenemos una lesión causada tanto por un traumatismo como por un deporte o actividad física, es normal que se haga reposo y se apliquen distintos tratamientos conocidos; como aplicar frio o calor en la zona, en lugar de ir con un especialista. Esto es normal y se puede hacer en caso de sufrir un dolor leve sin mayores molestias.

Sin embargo, cuando la lesión ya comienza a ser persistente o a modificarnos o importunar en la vida diaria, impidiéndonos realizar tareas normales, es hora de acudir a una consulta de fisioterapia, ya que puede desencadenar represalias más graves con el tiempo.

Un error muy común que se comete en estos casos, es automedicarse y esperar a que la inflamación se vaya; pero lo que suele ocurrir es que, aunque el dolor desaparezca momentáneamente, vuelva de forma espontanea o cuando se realizan actividades que requieran un esfuerzo de la zona afectada.

Esto se debe a que la zona o la lesión no se ha curado correctamente.

 

¿CÓMO DEBO TRATAR MI LESIÓN?

 

Los tratamientos pueden ser varios y muy variados, ya que depende del tipo de lesión.

Entre las opciones de tratamiento más regulares, podemos encontrar el reposo, analgésicos y masajes terapéuticos.

Sin embargo, como os hemos dicho, dependerá de la capacidad de recuperación del paciente y del tipo de lesión. Los tratamientos más comunes para tratar estas lesiones suelen ser:

 

• Rehabilitación física: En estos casos se da al paciente una serie de pautas y ejercicios para mejorar la movilidad y la fuerza de la zona afectada.

 

• Fisioterapia: En el caso de la fisioterapia, se da al paciente terapia manual, ejercicios y otros tipos de tratamiento que promueve una recuperación rápida y eficaz; y, además, también refuerza la zona para evitar posibles próximas lesiones.

 

• Cirugía: En estos casos, es cuando la lesión no puede sanar por medio de los pasos anteriores y que si no se trata puede producir varias molestias al paciente en su vida cotidiana; como dolores espontáneos, hinchazón, dificultad de movimiento, etc. Tras una intervención quirúrgica, también se deberá realizar ejercicio y terapia física para una mejor recuperación del movimiento.

 

 

Como habréis podido comprobar, los beneficios de tratar adecuadamente una lesión son variadas, pero podemos resumirlas de la siguiente manera:

 

• Mejora la fuerza, la movilidad y funcionalidad de la zona afectada.
• Previene futuras lesiones.
• Reduce notablemente el dolor.
• Mejora la calidad de vida al restaurar las funciones de la zona afectada.

 

Por eso, si tenéis alguna lesión que requiera tratamiento, siempre os recomendaremos que acudáis a un especialista para recuperaros de forma total y de la mejor manera posible.

Os esperamos en NeuroSport Ávila para poder asesoraros y trataros de forma adecuada. Os dejamos el siguiente enlace para que podáis echar un vistazo a todos nuestros servicios: Servicios fisioterapia NeuroSport Ávila.